Fotografía epistolar - Releer un libro

Bicicleta vieja, bicicleta herrumbrosa,  bicicleta antigua
La vieja bicicleta

Madrid, 15 de abril de 2016

 

¿Sabías César?

 

Con las ganas de releer Middlemarch de nuevo, puse patas arriba el cajón de mi mesita de noche, buscando el carnet de la biblioteca, ya sabes que me gusta releer esos clásicos en buenas ediciones porque si no, no hay manera de entender las traducciones.

Abrir de nuevo un  libro que se leyó con tanto placer alguna vez, es siempre una gallardía, no sabes a qué te enfrentas. La primera vez vas con inocencia, no eres responsable de lo que encuentres, la segunda vas cargada de intención y cada nuevo reconocimiento, cada matiz, cada sinsabor, goce o decepción hablarán tanto del personaje como de ti misma y del cambio que hayas experimentado en ese tiempo, de ahí la gallardía, porque quizá no siempre estés satisfecho con lo que averigües de ti .

Como te iba diciendo, rebuscando en el cajón encontré el jirón de tela de mi vestido que  quedó enganchado en el pedal de tu bicicleta, aquella fresca tarde de mayo, en que paseando por el campo, íbamos componiendo juntos un poema...tú con tu lenguaje visual del mundo y yo descorchando palabras del bolsillo de mi falda. ¡De pronto, ya teníamos toda una estrofa! y parábamos a escribirla antes de que se nos olvidara, apoyando el cuaderno en tu espalda...